El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Alcachofa de Benicarló participó este fin de semana en el I Congreso de Alcachofa Blanca de Tudela que se celebró en la localidad navarra de Tudela. En la reunión, a la que acudieron los principales productores de alcachofa de España, se abordó el presente y futuro de esta variedad, así como la problemática que plantean algunas plagas y la competencia que suponen otras variedades.
Junto a la delegación benicarlanda, formada por el presidente de la entidad, Victor Morera Forés, y el secretario, Guillermo Edo Barreda, también acudieron representantes de las asociaciones Alcachofa de España y la Alcachofa Vega Baja del Segura, de la Cooperativa Agrícola del Prat de Llobregat y de la IGP Alcachofa de Tudela.
“Este primer congreso ha supuesto una cita histórica en la que nos hemos reunido la mayoría de productores de alcachofa del país. Hemos mostrado, públicamente, la unidad que hay entre todas nuestras asociaciones para afrontar los ambiciosos retos de futuro a los que nos enfrentamos”, según ha explicado el presidente del CRDOP Alcachofa de Benicarló, Víctor Morera Forés.
Por ejemplo, en la reunión se pusieron sobre la mesa los desafíos que se deben abordar, a corto y medio plazo, y que pasan por seguir promocionando el consumo interno, estableciendo y reforzando sinergias con el turismo y la hostelería, afianzar e impulsar las marcas de calidad, desarrollar nuevos nichos de mercado e incidir en la diferenciación del producto en el etiquetado para ayudar al consumidor a distinguir qué variedades está comprando y el origen de estas.
Pero en este contexto también se evaluaron los problemas actuales a los que se enfrentan los productores, como la expansión en el mercado, cada vez mayor, de las alcachofas de semilla.
Asimismo, se evaluaron los efectos del cambio climático que, en ocasiones, trastoca los calendarios de plantación o incluso llega a arruinar cosechas, en alusión a los últimos episodios de inundaciones y el aumento de las temperaturas, la fatiga del suelo o la obligada reducción del uso de tratamientos.