La cooperativa de Benicarló emplea a más de 500 personas en plena campaña
Benihort ha arrancado esta semana la campaña citrícola 2020-21 con una perspectiva optimismo para la la campaña citrícola 2020-21: mayor volumen de kilos y una considerable demanda, ligada a la pandemia del Coronavirus, que ha puesto en valor a los cítricos como fuente de vitaminas C y A para reforzar el sistema inmunológico. Con estas favorables expectativas, la Cooperativa Agrícola de Benicarló prevé comercializar la producción de hace dos años, es decir, casi 50.000 toneladas de cítricos de calidad y seguros.
La cooperativa benicarlanda inició la semana pasada la recolección de las primeras clementinas Marisol y este jueves 15 de octubre daba el pistoletazo de salida al trabajo de confección en almacén para llevar a cabo los primeros envíos. Por su parte, tal y como explica el director comercial del área de Cítricos, Luís Montañés, “la semana próxima, se prevé que podamos comenzar a recolectar con continuidad las primeras mandarinas clemenpons y arrufatina, y la última de octubre, ya trabajaremos, prácticamente, con el 100% de los recolectores en la campaña más fuerte, que es la de la variedad estrella en Castellón, la clemenules”.
En cifras absolutas, la cooperativa prevé una comercialización de casi 50.000 toneladas de cítricos en la campaña 2020-21 y emplea en todas sus instalaciones a más de 500 personas en plena campaña citrícola.
Montañés resalta también que “en esta campaña habrá dos partes bien diferenciadas: una primera parte, entre noviembre y diciembre, en la que destacará un incremento de volumen respecto a la campaña pasada de un 30% en naranjas navelinas y un 25-30% de aumento en clementinas. Cabe destacar que la anterior temporada se caracterizó por un volumen reducido de producción y en ésta llegaremos a niveles de la del 2018-19, que fue muy productiva. Ya en la segunda parte, no se registraría un aumento tan considerable y las lanelates y valencias se consolidarían con unos valores muy parecidos a los de la campaña pasada”. Cabe destacar que la anterior temporada se caracterizó por unos volúmenes bajos de producción y en ésta se espera llegar a los niveles de la del 2018-19, que fue muy productiva.
La producción citrícola de Benihort se destina en un 90% a la exportación europea, mientras que el 10% restante se comercializa en nuestro país. Los mercados más destacados son: Francia, Alemania, Países Bajos y en Europa del Este, Polonia y Chequia, además de los países escandinavos. Por su parte, el mercado del Reino Unido continúa siendo una incertidumbre: “a partir del 1 de enero de 2021, se han impuesto unos aranceles a las exportaciones españolas de un 16% sobre el precio de venta. Quizás este impuesto afecte menos a las clementinas porque en esas fechas ya se estará acabando la campaña, pero sí que puede tener efecto, en mayor medida, a la segunda parte de la temporada”, apunta Montañés.
Crecimiento a tener en cuenta
Benihort continúa creciendo y con la ampliación de su ámbito de actuación, aprobado en la asamblea general del pasado mes de julio, “pasamos del ámbito de la Comunidad Valenciana al ámbito nacional, por lo que los socios y socias ya existentes pueden entrar en nuestra cooperativa producción de otras comunidades autónomas, lo que motivará un incremento importante del volumen de kilos”, según recuerda el director-gerente, Guillermo Edo Barreda.
La cooperativa de Benicarló también ha invertido en esta campaña en la mejora de sus instalaciones como la ampliación de la zona de pedidos y la construcción de una cámara frigorífica de preenfriado con capacidad de 10 camiones para su posterior carga frigorífica. Además, se ha rediseñando la ubicación de las oficinas comerciales y se ha adecuado este espacio a las nuevas exigencias en tema de sanidad y atención a socios/as y clientes. Al mismo tiempo, como resultado del Plan Estratégico 2016/2020, en el cual se planificó la plantación de nuevas variedades, se cuenta ya con cantidad importante cantidad de mandarinas tardías (nadorcott y tango), así como con un aumento de plantas de naranjas tardías para los próximos años.
Desde la cooperativa benicarlanda también recuerdan que, “desde el principio de esta pandemia, tanto en el campo como en los almacenes, hemos extremado las medidas higiénicas para seguir produciendo frutas con total garantía y seguridad. Estamos muy ilusionados con esta campaña y esperamos que la pandemia afecte, lo mínimo posible, a nuestro trabajo diario. Deseamos que la demanda y el consumo sean elevados, para comercializar la fruta de nuestros socios cooperativistas a un buen precio”.